APRENDIZAJE EMOCIONAL Y COGNITIVO

 

La imagen presenta un esquema sobre el aprendizaje, destacando la interacción entre los componentes emocionales y cognitivos. La frase "El cerebro está más preparado para olvidar lo nuevo que para recordarlo" indica que el cerebro, por naturaleza, tiende a olvidar información nueva con facilidad, a menos que se implementen estrategias específicas como la repetición y el esfuerzo consciente.

1. Aprendizaje emocional:

Características principales: Rápido: Las experiencias emocionales generan aprendizajes inmediatos. Indeleble: Los aprendizajes emocionales son duraderos y difíciles de borrar. Inconsciente: Muchas veces este aprendizaje ocurre sin que lo notemos. No requiere esfuerzo: Se da de manera natural y automática, principalmente a través de experiencias impactantes o significativas. Este tipo de aprendizaje está relacionado con la capacidad del cerebro de priorizar información relevante desde una perspectiva emocional.

2. Aprendizaje cognitivo-ejecutivo: Este aprendizaje se divide en dos áreas:

Emocional relacionado al mundo interior: Está relacionado con la inteligencia emocional intrapersonal, es decir, la capacidad de comprender y regular nuestras emociones. Y con la inteligencia emocional interpersonal, que implica entender y manejar las emociones en las relaciones con los demás

Intelectual relacionado al mundo exterior. Es lento: Requiere más tiempo que el aprendizaje emocional. Es fácil de olvidar: La información puede perderse si no se refuerza. Es consciente: Requiere atención y enfoque deliberado. Requiere esfuerzo, atención y repetición: Para consolidar este aprendizaje, es necesario practicar y dedicar energía.

Relación entre ambos tipos de aprendizaje:

El esquema destaca que lo emocional influye tanto en el aprendizaje rápido e inconsciente como en los procesos cognitivos más complejos. La gestión emocional es clave tanto para el desarrollo personal (mundo interior) como para las relaciones interpersonales (mundo exterior).

El aprendizaje emocional es más duradero y automático, mientras que el cognitivo-ejecutivo, aunque más difícil de consolidar, es fundamental para el razonamiento consciente y el desarrollo intelectual.